Seguramente ha escuchado, ya sea tanto de su nutriólogo/a, médico o de algún conocido, que el aceite de coco es sumamente dañino para la salud y que su consumo puede llegar a provocarnos enfermedades cardiacas como un infarto al corazón, después de todo, a mi me enseñaron lo mismo. Prácticamente todas las escuelas de nutrición enseñan que este aceite es sumamente dañino debido a su contenido de grasas saturadas y que las mejores opciones son el consumo de aceites vegetales como lo son el aceite de maíz, soya, girasol u oliva debido al contenido de grasas mono y poli insaturadas que en teoría nos ayudan a proteger nuestro corazón. Lo curioso de todo esto es que tendemos a creer este tipo de información sin antes investigar por nuestra propia cuenta el verdadero porque de las cosas. En este caso al momento de investigar las verdaderas razones del porque prohibir el aceite de coco, mi sorpresa fue bastante decepcionante.
Dinero, dinero y solo dinero
La respuesta es sencilla. Dinero, políticas y el no entendimiento han llevado a satanizar un alimento que por naturaleza es beneficioso para nosotros.
Algunas personas saben que el aceite de coco está compuesto básicamente por grasas saturadas y constantemente los profesionales de la salud nos están diciendo que se reduzca nuestro consumo de estas grasas. Las palabras “grasas saturadas” prácticamente se han convertido en un sinónimo de enfermedades del corazón. Muy pocas personas conocen la diferencia entre los Ácidos Grasos de Cadena Media (MCFA’S) que se encuentran en el coco y los Ácidos Grasos de Cadena Larga (LCFA’S) y muy larga (VLCFA’S) encontrados en carnes y otros alimentos.
Algo de Historia
Si nos regresamos unos cuantos años a los 1950’s, las investigaciones empezaban a demostrar de los increíbles beneficios que el aceite de coco aportaba a la salud. Así que ¿Cómo es que el aceite de coco se convirtió en el despreciable y arterio-tapante villano que hoy conocemos?
La mayoría de esta culpa la tiene la Asociación Americana de Soya (ASA). Trágicamente el aceite que llego a remplazar al aceite de coco, fue el aceite vegetal hidrogenado (principalmente de soya), uno de los más dañinos que hay en existencia. Si usted ha estado evitando el aceite de coco debido a su contenido de grasas saturadas, entonces usted es una de las miles de personas que han sido engañadas por literatura y publicidad de empresas cuyo único objetivo es el lucro.
El Dr. Weston A. Price, conocido como el padre de la nutrición, viajo en los 1930’s a las islas del pacifico para estudiar a los habitantes de estas islas y poder concluir el porqué la extraordinaria salud de estas personas. Se dio cuenta que principalmente la buena salud dental y nutricional se debía al consumo de coco en toda su forma, es decir, aceite, leche de coco y su propia carne. Entre las islas estudiadas se encuentran Hawái, Samoa, Fiji, Tahití, Raratonga y otras más.
Tipos de Grasas
A las grasas se les puede categorizar como Ácidos grasos de cadena corta, cadena mediana, cadena larga y muy larga dependiendo de las moléculas de carbono que contengan. Entre más grande sea la cadena mayor será la carga que el cuerpo tendrá para degradar dichas grasas. Lo ideal es consumir grasas cuyo contenido sean de ácidos grasos de cadena corta y cadenas medianas debido a que solo estas se pueden utilizar como energía inmediatamente y no se almacenan (como grasa) como los de cadena larga y muy larga.
Propiedades del Aceite de Coco
Aproximadamente 2/3 de la grasa saturada del aceite de coco está compuesta por ácidos grasos de cadena mediana, la cual tiene propiedades antimicrobiales, es fácilmente digerida por el cuerpo para la obtención de energía y es beneficiosa para el sistema inmunológico. Lejos de que las grasas saturadas del aceite de coco sean dañinas para nuestra salud, realmente son proveedoras de salud. Los ácidos grasos de cadena mediana no tienen efectos negativos sobre el colesterol y ayudan a proteger el corazón.
Cuando el aceite de coco es ingerido, el cuerpo transforma sus ácidos grasos “únicos” en un poderoso antimicrobial capaz de derrotar algunos de los microorganismos más causantes de enfermedades. Las propiedades únicas del aceite de coco lo hacen, en esencia, un antibacterial, antiviral y antifungal natural. El aceite de coco está compuesto de 48% acido Laurico, 7% acido capriíco 8% acido caprilico y .5% acido caproico. Todos estos ácidos que se encuentran en el aceite de coco resultan ser antimicrobiales, antivirales y antifungales poderosos que arrasan con algunos de los microorganismos para peligrosos que existen.
Otra cosa que cabe mencionar es que todos los tipos de aceites, ya sean saturados o no saturados, provenientes tanto de la vaca o de origen vegetal como son el de maíz, girasol, oliva y demás, contienen el mismo número de calorías por ración. Todos. Sin embargo, los ácidos grasos de cadena media del aceite de coco contienen un poco menos de calorías. El aceite de coco tiene un valor calórico de 6.8 calorías por gramo mientras que el resto de los aceites tienen 9 calorías por gramo de peso. Estamos hablando de 2.2 calorías menos por gramo de peso. Una cucharada de aceite convencional contiene 90 calorías, una cucharada de aceite de coco contiene 68 calorías.
Una de las cosas que he logrado notar a través de la práctica, es que gran parte de las personas realizan su contenido calórico a través del método de cocción del alimento. Esto es a través del uso excesivo de aceite para cocinar. Hay personas que logran alcanzar las 500 calorías por día solo en el uso excesivo del aceite. Estos aceites por estar compuestos de ácidos grasos de cadenas largas y muy largas hacen que toda esa energía sea almacenada inmediatamente como energía (grasa) especialmente a la altura de la cintura y cadera. ¿Sabia usted que un exceso de 3500 calorías forman el aumento de 1 libra de peso?
Aceites Convencionales Vs Aceite de Coco
Al decir aceites convencionales me refiero a aceites como: aceite de maíz, soya, girasol, cártamo, canola, oliva, etc. Todos estos aceites representan grandes desventajas cuando se comparan con el aceite de coco.
A todos estos aceites les afectan 3 factores, y estos son:
1. La luz
2. El oxigeno
3. La temperatura
1.- La luz.- idealmente todos los aceites convencionales deberían de estar empaquetados en botellas de vidrio y oscuras. Si nos fijamos bien, prácticamente todos los aceites los encontramos en botellas de plástico y transparentes. Esto hace que desde el momento que estos aceites están en el estantes de los supermercados la luz artificial les este penetrando y de tal manera esto los hace rancios. Cada vez que el aceite se hace rancio se generan radicales libres dentro de el y como ya mencionado en ejemplares anteriores, los radicales libres son sustancias sumamente nocivas para nuestra salud. Ahora, el hecho que estén en una botella de plástico solo agravia más las cosas debido a que como estos aceites los vierten hirviendo dentro de estas botellas y como bien sabemos el punto de ebullición del aceite es mayor que el del agua, este aceite hirviendo degrada parte de la botella de plástico y al momento de consumir dicho aceite terminamos consumiendo parte de una derivado del petróleo, ¿y qué tiene que hacer un derivado del petróleo dentro del cuerpo? Nada, absolutamente nada.
2.- El oxigeno.- Por más rápido que se destape y cierre una botella de aceite el oxigeno le penetra y esto solo hace que nuevamente se haga rancio el aceite y por consecuencia se generen radicales libres.
3.- La temperatura.- Por último, las altas temperaturas les afectan a todos estos aceites haciéndolos aun más rancios y por lo tanto más radicales libres. Como se podrán cuenta el producto final termina siendo una verdadera amenaza para nuestra salud.
Otra cosa que aun no he mencionado y de gran importancia es que, la mayoría de las compañías (si no es que todas) usan solventes orgánicos para poder obtener el aceite de dichas fuentes. Solventes orgánicos como la acetona, cloroformo, formaldehidos y otros más que son sumamente tóxicos para nuestro cuerpo. El motivo de ello es que para poder obtener el aceite de una semilla o grano es muy difícil hacerlo al menos que se utilicen este tipo de sustancias, de lo contrario ¿como se explica poder extraerle el aceite a semillas y granos como el maíz, ajonjolí, almendras?
El aceite de coco produce Energía
Cuando consumimos grasas, esta es digerida y degradada a ácidos grasos individuales los cuales son reempaquetados en pequeños sacos de grasa y proteína que se llaman lipoproteínas. Estas lipoproteínas son enviadas a la sangre donde los ácidos grasos son depositados directamente en nuestras células adiposas (que soportan grasa). Sin embargo los Ácidos Grasos de Cadena Media (como los que contiene el aceite de coco) son digeridos y utilizados de forma diferente. Estos ácidos grasos no son empaquetados en forma de lipoproteínas y no circulan en la sangre como el resto de las grasas y por lo tanto no son almacenados como grasa, estos ácidos son enviados directamente al hígado donde son inmediatamente convertidos en energía. Por lo tanto el consumo de aceite de coco no significa el aumento de peso (especialmente a la altura de la cintura) por el almacenamiento de energía como los aceites convencionales, si no que este aceite es utilizado como energía al momento de consumirlo. Además, el aceite de coco es uno de los alimentos que aumenta el gasto metabólico. Los Ácidos Grasos de Cadena Media hacen que el metabolismo de cada uno de nosotros aumente de una forma considerable haciendo que se quemen calorías en exceso. Debido a que este tipo de ácidos grasos incrementan el gasto metabólico, el aceite de coco es una grasa que promueve la pérdida de peso.
Estudios realizados
Los investigadores pueden evaluar los cambios que se realizan en el metabolismo a través de medir los gastos de energía, es decir, el gasto de calorías usadas por el cuerpo.
En un estudio realizado, el gasto calórico de varias personas fue medido después de consumir alimentos cuyo contenido tenía Ácidos Grasos de Cadena Media y se encontró que en personas con niveles normales de peso se incremento en un 48% su gasto calórico. Esto solo significa que su metabolismo incremento a un punto donde estaban quemando un 48% más de calorías que normalmente tenían. En personas con sobrepeso y obesidad el gasto calórico aumento en un increíble 65%. Así que a mayor cantidad de grasa corporal que la persona tenga, mayor será el efecto que el aceite de coco tendrá sobre el metabolismo. Este efecto termogénico de quemar calorías no solo dura 1 o 2 horas después de comer dicho alimento, estudios demuestran que después de comer algún alimento con este tipo de grasas, el metabolismo se mantiene elevado por al menos 24 horas.
Investigadores de la universidad de Mcgill (en Canadá) han descubierto que si usted remplaza todos los aceites en su dieta que están hechos de Ácidos Grasos de Cadena Larga y Muy Larga como lo son el aceite de soya, canola, girasol, maíz, oliva y los similares y los cambia por uno que contenga Ácidos Grasos de Cadena Media como lo es el aceite de coco, usted puede llegar a perder hasta 36 libras (16.3 kg) de grasa corporal al año.
Otros beneficios
Cuando el metabolismo se incrementa las células funcionan a un mayor nivel de eficiencia, regenerando tejido más rápidamente al igual que el remplazo de células viejas y enfermas por células nuevas. Esto hace que el sistema inmunológico funcione mucho mejor. A diferencia de los demás aceites, el aceite de coco protege contra enfermedades cardiovasculares (al aumentar el colesterol bueno), cáncer, diabetes y todo un conjunto de enfermedades degenerativas.Recuerden que somos aconsejados de mantener un consumo máximo del 30% de grasas del valor calórico total, sin embargo, los habitantes de las islas del pacifico antes mencionadas consumen grandes cantidades de grasas, de hecho alrededor de un 60%, y ellos gozan de una increíble salud cardiovascular, prácticamente las enfermedades cardiovasculares no existen entre ellos.
El uso de aceites vegetales refinados realmente produce la ganancia de peso, no solo de su contenido calórico el cual es almacenado directamente como grasa, sino que tienen efectos destructivos sobre la glándula tiroides la cual controla el metabolismo. Los aceites poli insaturados (los convencionales) suprimen las funciones de la glándula tiroides reduciendo el metabolismo, justo lo contrario que el aceite de coco.
Hemos vivido engañados durante mucho tiempo por empresas que de lo único que se preocupan es el generar ganancias. Si nos ponemos a pensar un poquito nos daremos cuenta que justo en los años donde los aceites vegetales antes mencionados, especialmente el de soya, llegaron a ocupar el mercado, es cuando los problemas cardiovasculares aumentaron en gran escala. ¿Tendrá esto algo que ver? Compruebe por usted mismo los increíbles beneficios del aceite de coco y se dará cuenta de lo que nos tratan de ocultar. Después de todo, los dueños de las empresas alimenticias son los mismos dueños de las industrias farmacéuticas, y si usted enferma (el cual es el objetivo principal) usted es candidato/a a comprar un medicamento y por lo tanto consumirles nuevamente.